Las mujeres con empleos estresantes tienen más posibilidades de sufrir un infarto cardíaco, un derrame cerebral o el taponamiento de arterias que aquellas con trabajos menos estresantes, según un nuevo estudio.
Asimismo, la preocupación de perder el empleo tiene el potencial de incrementar el peligro de sufrir males cardíacos, de acuerdo con un estudio financiado por el gobierno estadounidense.
Las conclusiones son particularmente interesantes en medio de la debilidad de la economía estadounidense, por la gran tensión que sufren quienes mantienen sus empleos y quienes carecen de ellos.
El sólo hecho de que se haya efectuado este estudio es señal de cambios en la sociedad conforme a los tiempos actuales. El estudio, que se constituyó en un análisis de largo plazo, examinó la tensión en las mujeres, quienes son casi la mitad de la fuerza laboral en Estados Unidos.
Estudios anteriores se centraban en los hombres, los proveedores tradicionales, y en esos documentos se concluía que el aumento de la tensión en el empleo elevaba el peligro de sufrir males cardíacos.
“La realidad es que estas mujeres no tienen el mismo tipo de empleo que los hombres” y a menudo carecen de autoridad o control sobre su trabajo, dijo la doctora Suzanne Steinbaum, directora del programa Mujeres y Enfermedades del Corazón en el Hospital Lenox Hill, en Nueva York. “No se trata sólo de ir a trabajar, sino lo que ocurrirá cuando se llegue ahí”, agregó.
“No nos centramos solo en el estrés. Pero es claro que el estrés causa un riesgo similar al de otros factores considerados modificables “, dijo Michelle Asha Albert, cardióloga del hospital Brigham and Women de Boston.
La experta encabezó un equipo que siguió a más de 17 mil profesionales de la sanidad durante una década. Entre ellas hubo 134 ataques cardíacos, y las mujeres con un empleo estresante tenían un 88 por ciento más posibilidades de sufrir un infarto. También tenían más tendencia a necesitar ser operadas del corazón.
Aunque aún no hay muchos datos sobre si funciona reducir el nivel de estrés, Albert sugirió que las mujeres que estén presionadas intenten incrementar la actividad física y desarrollar una red social más amplia.
Las mujeres con trabajos estresantes tienen un 40% más de riesgo de sufrir un ataque cardíaco, un derrame cerebral o de precisar cirugía por una arteria bloqueada, comparadas con quienes tienen una actividad más satisfactoria, según un estudio presentado el domingo pasado.
Las conclusiones del estudio fueron difundidas durante una conferencia de la Asociación para el Corazón de Estados Unidos, efectuada en Chicago.
Según el estudio, la inseguridad laboral, o el temor a perder el empleo, fue asociado a factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, como alta presión sanguínea, aumento del colesterol y exceso de peso corporal, señaló el estudio presentado en la reunión de la American Heart Association en Chicago.
“El trabajo puede afectar la salud de manera positiva o negativa, lo cual hace importante prestar atención a las tensiones del trabajo como parte del paquete total de la salud”, sostuvo Michelle Albert, autora principal del estudio.
“Las mujeres que ejercen un trabajo muy exigente y en el cual tienen poco control (…) corren un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular a largo plazo”, dijo Natalie Slopen, coautora del estudio e investigadora del centro de desarrollo infantil en la Universidad de Harvard.
(Fuente AP y Reuters Salud)