1. ¿Cuál es mi peso ideal?
Cada persona es diferente, por eso es difícil definir cuál es el peso ideal para cada uno. Pero hay tablas y fórmulas que nos aproximan al peso adecuado para cada uno de acuerdo al género (hombre/mujer) y la altura. La más sencilla se calcula dividiendo el peso en kg por la altura en metros al cuadrado: es el Índice de Masa Corporal (IMC).
El valor adecuado está entre 19 y 25.
- Si es menor de 18 es señal de bajo peso o desnutrición.
- Entre 25 y 30 se valora como sobrepeso.
- Si es mayor de 30 hay riesgo de obesidad.
De todos modos tenga en cuenta que esta fórmula sólo es válida para la población sedentaria. Por ejemplo, si hace mucho deporte tendrá mucha masa muscular y la relación entre peso y altura será diferente.
Si cree que puede tener problemas de peso (ya sea porque piensa que le falta o que le sobra), consulte a un profesional de la nutrición para que revise lo que usted come diariamente según su estilo de vida.
2. ¿Necesito suplementos de vitaminas y minerales en épocas de examen?
No si tiene una alimentación suficiente y variada. Los mejores “suplementos” consisten en cubrir las recomendaciones alimenticias. Tomar 3 frutas al día, una ensalada y una ración de verduras cocinadas al día son el mejor “suplemento”.
3. ¿Puedo ser vegetariano/a?
Una alimentación a base de vegetales, verduras y frutas, adecuada y bien planificada, aporta los nutrientes suficientes y necesarios en un adulto, pero un adolescente tiene unas necesidades de energía, minerales y vitaminas que, en general, son difíciles de cubrir con una dieta de tipo vegetariano. Si hablamos de una dieta ovo-lácteo-vegetariana (es decir, una dieta en la que únicamente excluya la carne y el pescado), las deficiencias son menores, pero normalmente, aun en este caso, es necesario complementarla con suplementos de hierro y vitamina B12. En general no se recomienda este tipo de alimentación hasta que el desarrollo y el crecimiento hayan finalizado.
4. No me gusta la fruta ni la verdura, ¿qué hago?
¿Está seguro? ¿No le gusta ninguna verdura, ni ninguna fruta? ¿Ha pensado en la cantidad de frutas y verduras diferentes que hay? ¡Pruébelas y escoja! A veces lo que no nos gusta es tener que pelarlas o trocearlas… a veces no nos gusta el sabor que adquieren al guisarlas de un modo particular. Pruebe las frutas en zumos y las verduras en ensaladas. Pruebe los purés añadiéndoles otros alimentos que le gusten (legumbres, queso…). Tome ensaladas de frutas y mézclelas con yogur o queso fresco, o con los cereales del desayuno. ¡Invéntese nuevas recetas! Seguro que entre la enorme variedad de frutas y verduras que existen encuentra algunas que le sí le gusten.
5. ¿Qué son los alimentos funcionales? ¿Son buenos para mí?
Son alimentos enriquecidos en algún nutriente o ricos en esos nutrientes de manera natural, que han demostrado, científicamente, que pueden tener algún efecto sobre las funciones corporales o prevenir alguna enfermedad.
Son beneficiosos si se acompañan con una alimentación equilibrada. No se puede pretender vivir sólo de alimentos funcionales. Ayudan, pero no son suficientes.
6. Si me salto alguna comida, ¿perderé peso más rápidamente?
Cada vez que come gasta energía al digerir y metabolizar la comida, así que saltarse las comidas no es la mejor forma de perder peso. Además, cuando se salta una comida llega a la próxima con más hambre y corre el riesgo de comer más de lo debido.
Por el contrario, para adelgazar se aconseja comer menos pero más frecuentemente: así disminuye la sensación de ansiedad y mantiene el régimen alimenticio más fácilmente.
7. ¿Son efectivos los complementos de proteínas para conseguir más masa muscular?
Sólo hay una forma de aumentar la masa muscular: el ejercicio. Es cierto que si se hace mucho deporte las necesidades de proteína aumentan ligeramente con relación a la población sedentaria, pero esas necesidades se cubren sin problemas con una alimentación adecuada, sin necesidad de suplementos. Más de 2 g de proteínas por kilo de peso son totalmente innecesarias. Además los complementos de este tipo son productos caros y pueden causar problemas renales.
8. ¿Por qué no debo ir a menudo a los establecimientos de comida rápida?
Porque la comida se sirve en ellos tiene generalmente exceso de grasa, azúcares y sal, nutrientes que deben limitarse en nuestra alimentación. No pasa si usted visita estos restaurantes de vez en cuando, pero no pueden transformarse en “ la base” de su alimentación. Además el éxito está en la variedad. Si se vuelve “adicto” a estos establecimientos es importante que tenga en cuenta que tomar comida rápida no significa “comer rápido”, y que hay muchos tipos como pizzerías, hamburgueserías, bocaterías, sandwicherías, kebbabs… ¡ Es importante que varíe! El consejo es claro: no coma hamburguesas todos los días.
9. ¿Por qué tengo hambre continuamente?
Porque estás creciendo y seguramente también se mueves mucho. Además está cambiando psicológicamente y tendrá problemas nuevos, los que no siempre sabe cómo enfrentar, y eso causa una ansiedad que a veces se intenta resolver comiendo.
Intente ser regular en las comidas. Quiere decir tenga horas fijas. Coma cuando es hora de comer. Por ejemplo, haga un buen desayuno y coma algo ligero a media mañana, así llegará con menos ansiedad al almuerzo. Programe un entredía a la tarde, una fruta será suficiente y prepárese para una cena variada, sin carbohidratos, con poca carne roja y con una porción de verduras.
10. ¿Son los lácteos beneficiosos?
Los lácteos fermentados con las bacterias del género Lactobacillus y Bifidobacterium son los alimentos probióticos más utilizados en la actualidad. Estos alimentos presentan características de olor y sabor agradables y muy aceptadas por los consumidores. Son fáciles de consumir y digerir, proporcionando cantidades importantes de nutrientes de muy fácil asimilación por el organismo.
Estos lácteos son valiosos desde el punto de vista nutricional, ya que proporcionan elevadas cantidades de nutrientes, con un bajo aporte energético en la mayor parte de los casos. Presentan un importante aporte de proteínas de alta digestibilidad y elevado valor biológico, el contenido graso es menor y la digestibilidad de la lactosa es mayor y mejor.