Muchos restaurantes ofrecen comidas deliciosas bajas en grasas saturadas, grasas hidrogenadas y colesterol, o preparan comidas a pedido. Con un poco de esfuerzo, puede asegurarse de que las comidas que consume fuera de su casa forman parte de una alimentación sana.
Siga estos consejos para elegir comidas bajas en grasa cuando come fuera.
- Al elegir un restaurante, trate de evitar los bufés de tenedor libre porque tiene más posibilidades de comer más (y más calorías) de lo que realmente necesita.
- Si ya conoce el menú de un restaurante, decida de antemano qué va a comer. Eso ayudará a evitar que elija comidas altas en grasas.
- Hablar con quién le sirve. Pregunte si el restaurante puede prepararle la comida según su pedido, por ejemplo, sin agregar o con poca cantidad de salsa, mantequilla, queso u otros elementos altos en grasa.
- Consulte si hay porciones más pequeñas o si puede compartir la entrada con otra persona. Si no hay porciones más pequeñas, pida una caja cuando realice el pedido y guarde la mitad de la comida para consumirla en otro momento.
- Si nota que las porciones son muy grandes. Haga un solo pedido y comparta. Así no desperdicia, le cuesta menos y se quita la tentación de comer en exceso.
- Analizar el menú. Recuerde que las comidas fritas, “gratinadas” (con queso), crujientes, cocidas en salsa, salteadas, untadas con mantequilla, con crema o rellena son altas en grasas y calorías.
- Si pide carne, quítele toda la grasa visible y pídale al chef que le quite la piel al pollo.
- Revise el menú para encontrar las comidas marcadas como “saludables”, o consulte con el camarero cuáles son las opciones más sanas.
- Al hacer el pedido, evite pedir los “extras” que se consumen antes de la comida, como cocteles, entradas, pan y mantequilla ya que son fuentes de grasa, sodio y calorías.
- Pida que le sirvan la mantequilla, el queso crema, los aderezos para ensaladas y las salsas a un costado del plato para que pueda controlar la cantidad que consume.
- Sea selectivo con las ensaladas. Evite los quesos, las ensaladas marinadas, las que contienen pasta y la ensalada de fruta con crema batida.
- Elija cuidadosamente los postres. Las frutas frescas, el helado de fruta y la gelatina son buenas alternativas, antes que los postres tradicionales que contienen grasa o están repletos de crema.